Providencia y Macul también tienen altísima demanda. En cambio, en Lo Barnechea, las unidades permanecen publicadas 50 días en promedio.

Un análisis de la plataforma inmobiliaria Toctoc identificó cuántos días en promedio un aviso está publicado en su portal, entendiéndose que la propiedad fue arrendada una vez que se retiró del sitio. Ñuñoa es por lejos el mercado con mejor velocidad de arriendo, anotando 28 días en conseguir un arrendatario, con unidades que tienen un precio promedio de $568.667. 'Su alta demanda se debe a su excelente conectividad, dado que cuenta con acceso al Metro y a principales vías de transporte público. También destaca por poseer una amplia oferta de servicios y equipamientos urbanos de alto estándar.

Por último, cuenta con una diversidad de opciones habitacionales con diferentes rangos de precios', señala Cristóbal Bravo, research manager de Toctoc. Claudio Arriagada, agente de Re/ Max Select Ñuñoa, concuerda que su buena conectividad con el resto de la ciudad la convierten en un lugar deseado. 'Esto le permite desplazamientos rápidos a Providencia y a Santiago Centro en tan solo 15 minutos. Además, cuenta con una amplia variedad de servicios, colegios, universidades, bancos, etcétera', indica.

Suma que Ñuñoa muestra valores de arriendo más asequibles en comparación con comunas vecinas como Providencia o Las Condes. 'Esto genera un flujo constante de interesados que buscan asegurar la mejor relación precio-calidad antes de tomar una decisión definitiva, lo que también puede influir en los tiempos de cierre', plantea. Por otro lado, el inicio del año académico también es un factor clave en la rotación del mercado de arriendos en la comuna. 'La presencia de universidades cercanas y colegios de alto nivel hace que muchas familias y estudiantes busquen propiedades en esta comuna en estas fechas, ajustando los tiempos de negociación en función de sus necesidades académicas', aporta.

Otra comuna que tiene un buen ritmo de arriendos es Providencia, donde las unidades se arriendan en 29 días, aunque el precio promedio alcanza los $875.901. 'Providencia y Ñuñoa destacan como las comunas más asequibles del sector oriente para arriendos en los segmentos de uno y dos dormitorios. En ambos casos, la conectividad juega un papel clave, con acceso directo al Metro y a importantes avenidas', precisa Bravo. 'En Providencia, el sector de Tobalaba es donde el arriendo se mueve con mayor rapidez. Mientras que en Ñuñoa ocurre lo mismo en el área cercana a Avenida Ossa. Esto refleja que la alta demanda se concentra en zonas de fácil acceso, sumado a una oferta consolidada de servicios y equipamientos urbanos', aporta.

Macul también anota buenos números, con 30 días de avisaje y precios promedios más bajos que los anteriores mercados, con $434.109 en promedio. 'Este buen ritmo obedece principalmente a su ventaja en precios. Un departamento de dos dormitorios y dos baños en Macul es 25% más barato que en Ñuñoa, a pesar de estar a pocos minutos de distancia. Esto la convierte en una alternativa atractiva para quienes buscan una buena ubicación y conectividad, pero con un costo más conveniente', sostiene Bravo.

Ritmo lento

Lo Barnechea es una de las comunas con peor desempeño respecto a los arriendos, con 50 días de avisaje en promedio. Los precios se mueven en torno a los $1.847.843. El analista dice que en comunas con arriendos más caros el movimiento suele ser menor, ya que los contratos tienden a ser más largos. 'Además, en Lo Barnechea hay muchos departamentos grandes, de tres y cuatro dormitorios, que suelen ser arrendados por familias ya establecidas, que son menos propensas a mudarse. En cambio, en comunas con más oferta de departamentos de uno y dos dormitorios, como Ñuñoa o Providencia, el flujo es mayor porque los arriendos están más orientados a solteros y familias en crecimiento, que cambian de hogar con más frecuencia', argumenta.

También en Maipú los departamentos demoran bastante en arrendarse, con 52 días promedio publicados y precios cercanos a $480.209. 'Si bien la comuna ofrece valores competitivos, su ubicación juega en contra. Para quienes trabajan en el centro o el oriente de Santiago, la distancia y el tiempo de traslado suelen ser un factor decisivo. Por montos similares es posible encontrar departamentos en comunas como San Joaquín o San Miguel, que ofrecen una mejor conectividad y acceso más rápido al resto de la ciudad, lo que termina inclinando la balanza a su favor', explica.